lunes, 22 de abril de 2013

20 DE ABRIL DE 2013. EL ENCUENTRO DE LA DIVERSIÓN.

 

 
 
Sigüenza, dos años después… del 25 aniversario
 
CARMEN BENITO. Madrid 22-04-2013 .
El pasado sábado volvimos a Sigüenza, un día con el que soñábamos desde hace dos años y que habíamos preparado con mucha ilusión durante meses. Era el segundo encuentro de safos y ursulinas de la promoción 85-86 más todos los agregados, entre los que me incluyo. Si el primero (30 abril 2011) fue un día marcado por la emoción, éste estuvo marcado por la diversión, sin dejar de lado cientos de emociones, sensaciones y recuerdos. Y es que a pesar de la bajada brusca de temperaturas del día anterior, el termómetro corporal estuvo por las nubes durante todo el día. 
La Eucaristía
 
Nos habíamos citado a las 12 de la mañana en la puerta de La SAFA. Como siempre, los del coro una hora antes para ensayar las canciones, que como años atrás, Use había traído para todos y que encontrasteis en los bancos de la capilla del colegio. Quisimos incluir varias de las de la primera vez, como el Ven Sígueme (tema que cantaron los coros de ambos colegios en el Cuarto Festival de la Canción Vocacional y este día a tres voces) y algunas nuevas: comenzamos con “Hoy Amanecióha parado de llover  (algo simbólico, después de un invierno cargado de lluvias, que también fue interpretada en su día en el Tercer Festival) para terminar con un mensaje positivo ante la actual crisis y que fue de Color Esperanza”, la de Diego Torres. Esta vez la misa fue presidida por D. Rafael Amo Usanos, director de la SAFA, que estuvo acompañado por D. Pedro y D. Antonino; éste último nos dijo que habíamos pasado de ser ovejas a pastores y que todo lo que enseñáramos y compartiéramos con nuestros hijos, sería algo que nunca se les olvidaría.
 

Y antes de la comida…
Acabada la misa no podía faltar alguna foto para el recuerdo: en la capilla, el patio, la escalera y en la puerta del colegio. Apuesto a que algún despistadillo se las perdió y es que había muchas ganas de diversión. Como quedaba más de hora y media para la comida había que hacer tiempo y ¿qué mejor que tomar un refresco en los chiringuitos de La Alameda? Pues dicho y hecho, Fue el momento en el que aproveché para hacer una visita a las monjas y para revisar lo que sucedía en el resto del mundo para mi informativo de fin de semana, pues a pesar de nuestro encuentro el planeta Tierra sigue girando (por si no os habíais dado cuenta, cosa lógica por otro lado…)

Lo siguiente fue la comida en el restaurante CASTILLA. Allí comprobé que al final no seríamos tan pocos como parecía en un principio y al igual que al inicio de la misa, fue otro momento de saludos, reencuentro con personas entrañables que hacía tiempo que no veíamos, besos, abrazos, bromas, risas y sobre todo buen ambiente. D. Pedro y Cristina, la profe de matemáticas nos acompañaron también y al acabar volvimos a ver (aunque apenas escuchar) el vídeo que habíamos preparado con tanta ilusión para el primer encuentro, al que Use añadió todas las fotos que restaban del 30 de abril de 2011, pues algunos no habían tenido ocasión de verlo. Fue divertidísimo comprobar las caras de algunos, así como los comentarios y cómplices sonrisas al paso de cada una de las fotografías (algunos, incluso se sonrojaron al verse de nuevo tan bien acompañados). Si alguno no pudo verlo bien o escucharlo no importa porque tendrá ocasión de hacerlo nuevamente, pues Use nos regaló un pendrive con dicho vídeo para que podamos compartir esos momentos con nuestros familiares y amigos. Después de este vídeo vimos otros de antaño celebrando en el Oasis la fiesta de fin de curso de La SAFA haciendo las complicadas tablas de gimnasia. Sólo Use sabe cómo los consiguió…
Bien, pues ya habíamos comido y quedaban dos horas al menos para la cena y posterior concierto que prometía ser muy animado con ESTUDIO 80. Momento nuevamente de despedidas para los que se marchaban y para el resto de seguir “reconociendo” la Ciudad del Doncel.

 
 
Ágape y concierto de los 80
Casi estaba anocheciendo, ocasión que algunos aprovechamos para disfrazarnos con las ropas, pelucas, complementos y “gafitas” que Auxy se encargó de traer. Seguro que para ella fue una tarea laboriosa, pues había para todos. El momento de vestirnos fue de lo más divertido y sobre todo lo que nunca olvidaré son las caras de los propietarios del hotel donde algunos os alojasteis, que no daban crédito a tenor de sus expresiones. Se hacía tarde y el resto habíais empezado a dar debida cuenta del ágape, mientras nuestros WhatsApp no paraban de sonar para que aceleráramos. Tranquilos, que de esto hay documento gráfico, al igual que de la comida. Menos mal que era ya de noche y que fuimos en coche hasta el ASADOR DE SIGUENZA, ubicado en La Alameda, porque si no aún estarían hablando de nosotros en toda la comarca.   
Todavía retumban en mis oídos las risas al vernos llegar y cómo se animaron algunos más colocándose pelucas, vestidos y todo tipo de accesorios para disfrutar de la fiesta. Una fiesta que el grupo de Guadalajara ESTUDIO 80 se encargó de caldear, ¡¡si es que el ambiente estaba ya poco animado!! Un repertorio amplísimo de canciones de los 80 que todos coreamos y  bailamos y que apuesto que disfrutamos más que entonces porque estando internos no había ocasión de hacerlo. Grupos y cantantes míticos de la música española y extranjeros como Nacha Pop, Los Secretos, Alaska y Dinarama, la Guardia, Radio Futura, Loquillo o Dire Straits se unieron a muchos más de entonces y de ahora, como Fito y Fitipaldi interpretados maravillosamente bien por el grupo alcarreño. Y como en todos los conciertos y ya finalizando, el solista presentó a cada uno a uno a los componentes del grupo. Y como en todos los conciertos los músicos se despidieron. Y como en todos los conciertos pedimos OTRA y hubo bises. Y después dieron las gracias al inestimable y animado público, esperando volver la próxima vez. En este caso éramos safos y ursulinas ¿quién nos iba a decir hace casi 30 años que disfrutaríamos de algo similar y sólo para nosotros?
En honor a la verdad he de decir que lo pasamos de cine… y que esperamos repetir en poco tiempo. Con los organizadores tan maravillosos que tenemos aseguro que el éxito está garantizado. A los que estuvisteis fue un placer pasar juntos más de 12 horas y a los que no pudisteis asistir que sepáis que os recordamos y que esperamos volver a vernos. Desde Madrid os mando un besos a los unos y a los otros y GRACIAS por todo lo que compartimos y nos queda por compartir  ¡¡¡ SOIS FANTÁSTICOS!!!



SOLO DIEZ MINUTOS...

No notaba frío.

No llovía.

No temía no reconoceros ya que nos habíamos visto hacía apenas dos años (a algunos hace bastante menos).

Sé que no lloraría al regresar.

Sé que no me quedaría con la sensación de que ese próximo tercer encuentro nunca se volverá a producir.

Sé que nos volveremos a reencontrar.

Y así amanecí. Nervioso durante una larga noche dando vueltas en la cama; nervioso por si el despertador no sonaba. Pero sonó. Lo hizo bastante después de que mis ojos hubieran logrado su diámetro normal.

Cogí la guitarra. Cogí la pandereta (que no llegamos a usar). Cogí dos magdalenas para el camino. Cogí esa sonrisa, rescatada en abril de 2011, y que resultaba ser la misma que guardaba en mi memoria desde hacía 27 años.

Llegue a mi destino. Era pronto aun y tomé café.


Estaba solo.

Quería estarlo.

Necesitaba estarlo.
 
Aunque fuese un momento.

Y paseé: 10 minutos nada más, 10 minutos en los que una vez más me dejé envolver por la magia de Sigüenza.

Faltaban seis minutos para las once. En la puerta de la Safa estaban los más madrugadores. Quizás aquellos que aun durmieron más nerviosos que yo. Abrazos. Alguien se asustó al verme “¿Y la guitarra?” me preguntaron. “Ahora voy a por ella”, respondí.

Y ensayamos las canciones de la misa. Mis dedos no siempre alcanzaban a tocar la cuerda apropiada de la guitarra, “debí ensayar en casa más veces”– pensé. Pero mi sensación es que sonaron bien las canciones. Sobre la misa solo decir que me alegré de ver a “nuestros” curas en el Altar. Y aun escucho dentro de mí esas palabras de Antonino tras la comunión. Espero seguir oyéndolas toda la vida.

Momento de saludos. Eché en falta en este encuentro a varios de nosotros, pero permitidme, sin desmerecer a nadie, que a título personal mencione cuatro nombres por esa especial o quizás más intensa relación que mantuve en aquellos años con ellos: Arturo (Boxi), Adolfo (Baeza), Gregoria y Santi (Cuca).

El resto del día fueron momentos de vivencias, recuerdos y sobre todo muchas risas. No me detendré en recordar cada charla ni cada abrazo. Creo que al igual que relaté hace dos años, volví a ver caras de las que no recordaba su nombre, y recordaba nombres a los que no ponía cara, pero durante estas horas todos éramos uno, todos disfrutábamos juntos de esas horas con la ilusión del reencuentro y el deseo de repetirlo.

Todos estábamos envueltos por la magia de Sigüenza.

¿De verdad que nadie más paseó a solas durante diez minutos?

 
Miguel Angel Sevillano.